Hay dos cosas que disfruto mucho en la vida, la primera es reconocer la vida como un viaje eterno para expandir nuestro horizonte, y la segunda es el arte de hilar palabras para sembrar reflexiones que nos conduzcan a establecernos en nuestro propio centro. Hoy tengo el gusto de compartir públicamente algo en lo que he venido trabajando hace algún tiempo y que...